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Los trozos de taza te calmaron el dolor.
Apenas.
Flagelo turbio y torpe de ansiolíticos cotidianos.
Despertarme agotado con tu frustración en el rostro.
Todas las cosas aúllan tu rabia.
Por favor,
dejate querer.
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lunes, 26 de octubre de 2009
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bueniiiiiiisiiiiiimo leooo!!!!
ResponderEliminarCaramba Leo! hacia tiempo que no me hacía un llegue por estas paginas y me voy contento de encontrarme con semejante nivel de poesía, de verdad te digo lo que te digo. contento y alegre
ResponderEliminarse vemos
el lucas
Muy bueno! me gustó...
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